16 de diciembre de 2014

Otra vez

No se espera más que lo que no depende de nosotros y no se quiere más que lo que sí depende de nosotros. Trata de tener la esperanza de caminar... ¡Eso jamás ha hecho que nadie se moviera! Por lo demás, ¿quién habría de tener la esperanza de caminar excepto el paralítico? Nadie espera aquello de lo que sabe que es capaz, y eso dice mucho al respecto sobre la esperanza. "No es más que impotencia del alma", decía Spinoza, y ése era el espíritu del estoicismo, espíritu aún vivo. "Cuando hayas desaprendido a esperar -venía a decir Séneca- , yo te enseñaré a querer..." Y es cierto que ambas cosas van juntas: se espera tanto más cuanto menos capaz se es de ación, y se espera tanto menos cuanto más se sabe actuar.

La pequeña botella de Sake se terminó. Leo a Comte-Sponville y copio aquí este fragmento.